menos miedos más riquezas
INTRODUCCIÓN Y REFLEXIONES INICIALES
El miedo a la oscuridad hizo que inventáramos la bombilla; el miedo a la enfermedad hizo que descubriéramos la medicina; el miedo a la soledad hizo que buscáramos compañía. ¿Ves cómo el miedo es una poderosa fuente de progreso?
- De cada quien depende como se viven las circunstancias de la vida en la que no tienes el control, lo que pienses al respecto te podrá hacer sentir más o menos tranquilo.
- “Si Dios nos ha dado la oportunidad de seguir vivos, pongámonos un reto y saquemos provecho de lo que acaba de pasar”.
- El cerebro sobrerreacciona en muchas ocasiones a situaciones triviales. No todo es un tema de vida o muerte. Pregúntate, por ejemplo, si estas realmente en peligro o todo está en tu mente; y a la respuesta que surja añádele por favor esto: las expectativas sobre algo con fundamento o no, agudizan el temor actual.
EL MIEDO
No intentes alejar el miedo; invítalo a tu vida. Disfrútalo; se desvanece como lo hace un trozo de hielo bajo el sol.
- El miedo es una bendición para progresar.
PENSAMIENTOS Y MENTALIDAD
Lo que pensamos es lo que ocurre; el pensamiento negativo es muy peligroso pues se transforma en realidad. Sin proponérnoslo, caemos en él; y sin recordarlo, desconocemos luego porque nos pasan ciertas cosas que no deseábamos. Las cosas semejantes se atraen; es un hecho. Piensa positivo y empezaras a ver como suceden mejores cosas en tu vida.
- Cada quien es su propio arquitecto mental, sea que este o no consciente de ello.
La riqueza externa solo refleja el poder acumulado de la riqueza interna, alimentada por los pensamientos nobles que albergamos. Como ya lo sabemos, “las circunstancias no hacen al hombre, solo lo revelan”.
CIRCUNSTANCIAS
“El hombre será abofeteado por las circunstancias mientras él piense que es una criatura de las condiciones externas; solo cuando entienda que tiene un poder creativo, verá cómo se convierte en el maestro de sí mismo”.
SOÑAR Y HACER QUE SUCEDA
El poder de las metas es el poder de convertir los sueños en realidad. Nada de decir “algún día las lograre” o “tal vez sucederá”. Que quiero, cuando y cuál es el plan para lograrlo. No es solo trabajo duro. Es un deseo profundo, más un pensamiento creativo, más una fe inquebrantable durante todo el camino, la mejor de las recetas.
EL PODER DE LOS NUEVOS COMIENZOS
Nunca pienses en tus fracasos luego de haber aprendido de ellos. No te aferres a ellos. El arte de olvidar es esencial para un nuevo comienzo.
- No te ocupes del miedo; ocúpate de ti. El miedo llego, como ventaja, para que te hicieras más grande.
- El miedo nos mantiene vivos. El miedo también es un reflejo de supervivencia. Así de simple.
MIEDOS, GENERACIÓN DE RIQUEZA Y LIBERTAD FINANCIERA
Aquello que odias, es aquello de lo que te alejas. Algunas personas pobres de mentalidad odian a los ricos solo porque son ricos. Seguirán siendo pobres.
- Tú obtienes lo que decretas; conocer de primera mano lo que te gusta, te acercará a conseguirlo.
SUGERENCIAS PARA ALCANZAR TU LIBERTAD FINANCIERA
El dinero en sí mismo no es nada, no tiene sentido una riqueza que se basa en acumular dinero y bienes materiales; acumulación no es riqueza. Generar ingresos para cumplir y satisfacer tus motivaciones más elevadas y profundas, si tiene sentido.
Descubre tu talento, tu para qué, y hoy en día apaláncate en la tecnología y en lo que sabes hacer para que ello te genere ingresos incluso mientras duermes.
¿POR QUÉ LA MAYORÍA NO CONSIGUE DINERO?
No hay diferencia alguna entre una persona pobre, financieramente hablando, y otra que quiere ser rica pero que no hace nada útil para lograrlo. En Latinoamérica muchos quieren adelgazar, comiendo mucho más.
Alguien me dijo una vez, “si usted cree tener muchos conocimientos sobre algo o se cree muy inteligente, eso lo debería reflejar su cuenta bancaria”. Eso llegó muy hondo, un golpe al hígado, y desde entonces he tenido el reto de extraerle dinero a mis conocimientos. Volver dinero lo que sé o aprendo se convirtió en un desafío permanente para mí.
Hay gente que, con muy poco hace mucho, y hay gente que con mucho hace muy poco. Hay condiciones de desventaja para muchos que prácticamente los rotularían de potencial fracaso, y sin embargo se apalancan con lo que saben o tienen.
“QUEMAR LAS NAVES”
Una cosa es creer que ganamos mucho y otra cosa es que así sea. Alguien me decía en cierta ocasión que el día en que te sientas el más inteligente del salón, amplia el tamaño del salón; solo así seguirás progresando.
No dependas de tus ingresos como empleado, por contento que estés, por importante que creas que eres, o porque te hayan dicho: “igual a ti no hay nadie”. ¿Sí? No te creas eso, “no te tragues ese sapo”.
Siempre que vayas a desarrollar un negocio piensa si se puede opera en piloto automático; mientras más automatizado tengas un negocio, más tiempo libre tendrás para lo verdaderamente importante. Hay personas que van de aquí para allá; siempre están escasas de tiempo, trabajan bastante, están en múltiples reuniones, conocen a mucha gente, pero al final del día, como dicen algunos, no progresan financieramente.
LOS MAYORES MIEDOS
Solo cuando tu sientas placer haciendo algo, lo haces; solo cuando sientas que algo te produce un beneficio, lo llevas a cabo.
Hacer el ridículo es en muchas ocasiones vencerse a sí mismo; para una vaca purpura, para un ser especial, no hay nada más serio y trascendental en la vida que vencerse a sí mismo cuantas veces sea posible.
EL MIEDO A CAMBIAR
Todo ser humano posee la libertad de cambiar en cada instante. Podemos predecir el futuro de un hombre en el marco de un estudio estadístico, pero su personalidad es impredecible. La base de cualquier predicción viene conjugada por las condiciones biológicas, psicológicas o sociológicas. Sin embargo, uno de los rasgos principales de la existencia humana, es precisamente, la capacidad para elevarse por encima de esas condiciones y trascenderlas. Análogamente, en última instancia, el hombre se trasciende a sí mismo, es un ser autotrascendente.
- Uno cambia solo si quiere; cambias si hay razones fuertes para ello.
Creemos que nuestros problemas son insuperables; hasta que los comparamos con los de otros que, por cierto, no se quejan.
EL MIEDO A NO SER FELICES
No me llevaré nada; solo lo que viví y lo que hice. Primero, agradece todo cuanto te pase, incluyendo lo que en apariencia no sería susceptible de agradecerse; y segundo, disfruta las cosas buenas que te pasen; celébralas, vívelas, siéntelas, aprécialas, sin que tengas que estás pensando en que son poco frente a las que probablemente vengan.
No podemos esperar a reencarnar para ser felices; debes vivir la vida que tienes pensando en que será la última. Las posibilidades con las que cuentas hoy quizás no las tengas mañana.
Concluí que alcanzar una meta es un gran motivo para festejar por lo que hicimos bien, pero no es el límite para detenernos y dormirnos en los laureles. Hay que disfrutar de cada momento, de cada meta conseguida, agradecer infinitamente porque la vida nos permitió alcanzar ese momento, pero siempre lograr tener la perspectiva de que podemos dar un esfuerzo más, que siempre habrá cosas más grandes para lograr y que podemos hacerlo.
EL MIEDO A NO ENCONTRAR NUESTRO PROPÓSITO DE VIDA; NUESTRO PARA QUÉ
Te daré luces concretas para que encuentres ese propósito: no hay nada más importante que servir; desde lo que hagas, con tus palabras, con tu compañía, con tu atención, con tu tiempo, con tu dinero, con las uñas si es necesario. A eso viniste a este mundo. Y como sé que te gusta el dinero, te diré algo: cuando menos lo he buscado más me ha llegado.
Al servir, sientes que la vida tiene un mayor sentido, sobre todo cuando compruebas que tus palabras y lo que haces han contribuido a cambiar algo y, como no, cuando te lo dicen las personas a quien sirves.
Cuanto más se olvida uno de sí mismo, al entregarse a una causa o a la persona amada, más humano se vuelve y más perfecciona sus capacidades. Por el contrario, cuanto más se empeña el hombre en alcanzar la autorrealización, más se le escapa, pues la verdadera autorrealización es el efecto profundo de cumplimiento del sentido de la vida. En otras palabras, la autorrealización no se logra como un fin, sino que es el legítimo fruto de la trascendencia.
EL MIEDO A INCOMODARNOS; LA PELIGROSA ZONA DE CONFORT
Pocas veces reflexionamos en el riesgo de no correr riesgos; y ese es el mayor riesgo de todos. Queremos rentabilidades altas, pero con riesgos bajos. Queremos el cielo, pero no nos queremos morir. Contradicciones de los seres humanos que se alimentan de experiencias pasadas.
- No le temas entonces a los momentos difíciles; témele a la comodidad. La comodidad es un atentado contra el progreso.
- Cuando vas creciendo como persona necesitas incluso de la incomodidad, porque sabes que ella te permitirá seguir avanzando.
Así, no te sorprendas si por superar las incomodidades te vuelves una persona alegre, positiva, creativa; una persona con la que la gente quiere estar.
Por más intolerante que sea ante la incomodidad, la verás diferente si ella te hace crecer y te conviertes en una persona más sabia y feliz.
UN EJERCICIO PARA SUPERAR LA INCOMODIDAD
Abrazar te vuelve más humano; te recuerda que tú no eres más que la persona que abrazas; te permite entender que, si la vida te puso a abrazar a alguien que no conoces, no es por el mero azar; que si estás ahí porque debías conocer a ese alguien que te puede enseñar, aportar e inspirar.
EL MIEDO A SER DIFERENTES
Si tienes una mentalidad púrpura, ganadora, entenderás que estás ahí para enviarle un mensaje de abundancia a tus vecinos: “si yo pude progresar, qué esperan ustedes para hacerlo”.
- No hagas lo que todo el mundo hace. Cualquier mortal juzga, critica y se queja; no cualquiera comprende, a lienta y acepta.
- No alardees de tus posesiones ni de tus logros; pero no los escondas. Ponerles velo a las cosas impide verlas como son, y quienes queremos seguir progresando, necesitamos seguir viendo avances en más personas.
Yo soy una persona estudiosa, tozuda, determinada, perseverante y con el don de la palabra; si yo me apalanco con esas fortalezas, puedo encontrar no solo neológicos exitosos en los que pueda desarrollarlas, sino también mi propósito de vida. ¿Y los defectos? Tengo muchos; pero ellos quedan eclipsados cuando persigues una motivación grande.
Recuerda que a la tumba irás solo, sin nadie, y que la palabra que más seguirás pronunciando hasta que te mueres, será: YO. Tú eres primero.
EL MIEDO A NO CREER EN NOSOTROS MISMOS
Un ser púrpura saborea la aventura; se hace más grande con las adversidades y hasta las disfruta. Es capaz de extraer placer a lo que solo supone dolor, y sin perder de vista lo que busca, es consciente de que no existe un camino para la felicidad, pues la felicidad está en el camino.
No hay nada que funcione mejor en la vida, ni que te permita dar saltos cuánticos, abruptos, grandes, que recomponer esa frase y decir: hay que creer para ver.
EL MIEDO A VIVIR UNA VIDA EXTRAORDINARIA
La mayoría se dedica a sobrevivir; no a vivir. La mejor inversión que puedes hacer es dedicarte a ser feliz, y a vivir la vida. A pesar de ello, esas mayorías viven como si se les hubiese prometido una reencarnación. Nadie te ha prometido el día de mañana; vive el día de hoy como si fuera el último de tus días. Y no pienses en el qué dirán. Haz lo que tengas que hacer, sin importar que a todo el mundo le guste. Si no prácticas, serás una presa más del sistema.
Ya he dicho que el dinero no es lo más importante; pero afecta todo aquello que sí lo es. El dinero SÍ compra felicidad, NO la felicidad.
- “Hay muchos ricos que no son felices”. Claro, ¡y muchos más pobres que tampoco lo son!
Vivir la vida no es comprarse solo lo mejor, ni lo más caro. Es tener la actitud, la predisposición para disfrutar una buena copa de champaña en el crucero de tus sueños por las islas griegas, así como un buen trago de ron en la tienda de la esquina y sentados en el piso. ¿Con cuáles puedes ser feliz? Con las dos. Y en las dos no eres ni más ni menos persona; pero que puedas escoger, no que debas vivir solo una de ellas, porque así te tocó.
EL MIEDO A ASUMIR RETOS. ¿SÍ SERÉ CAPAZ?
La actitud ayuda a conseguir lo que te propones; no solo tus objetivos materiales, sino también espirituales. En ese vínculo actitud-riqueza, morir pobres, hoy en día, es un acto de irresponsabilidad, teniéndolo todo a tu alcance, como para morir ricos o sin afugias económicas como mínimo.
- Hace mucho tiempo tengo claro que la historia solo recuerda a los intensos, a los obsesivos, a los apasionados. Los demás son demasiados como para ser recordados.
- La gente realmente púrpura está llena de confianza y optimismo sobre lo que pueden llegar a ser. Y la consecuencia lógica es que el miedo a sumir retos no exista y el objetivo se cumpla. Así funciona la vida.
Preguntarte por qué te pasan las cosas te hace víctima; preguntarte para qué te pasan te vuelve emprendedor.
Un ser extraordinario no se queja de la falta de oportunidades, no se une a ese lamento generalizado; ve, huele, crea, identifica y aprovecha oportunidades.
MIEDO A PERDER EL EMPLEO
“¿Y si aun así continúa el miedo, Juan Diego?”. Si no tienes las agallas para ir por una vida extraordinaria, quizás es porque te merezcas la que hoy vives. Muy fuerte, lo sé. O como lo dijera alguien de manera aún más cruel: “bienvenido al mayor rebaño del mundo; el de las vacas blancas”.
SUPERA TUS MIEDOS Y OBTÉN TUS RIQUEZAS
Nunca serás tú mientras no te dediques a hacer lo que mejor haces. Tú no te cansas por trabajar mucho; tú te cansas cuando no disfrutas lo que haces. Nada que produzca más fatiga que una vida rutinaria. ¿Te suena?
Recuerda: seguirás sintiendo miedos; lo importante es que tus motivaciones, tus ganas por hacer algo importante y trascender, el ejemplo de hoy o mañana querrás ser para tus hijos, sean tan grandes que el miedo ni cuente, ni importe.
DISFRUTA EL MIEDO
Apaláncate con el miedo, disfruta el miedo, cualquier miedo que llegue a tu vida. Así como suena. Míralo con placer; con el placer de superarlo; con el placer de vencer esa voz limitante que tú puedes controlar. No vences un miedo solo por vencerlo. Vences un miedo para demostrar quién está al mando, si tu voz limitante o tú.
Piensa que las personas que producen en ti las reacciones que menos deseas, son maestros disfrazados que te envía la vida para que progreses.
- Haz todos los días algo que te incomode; haz todos los días algo que te dé miedo. Siente el placer de vencerlo.
RECONOCE TUS FORTALEZAS
Que no te dé miedo hablar de ti; que no te dé miedo mostrarle al mundo que tú puedes ser la fuente para solucionarles problemas; que no te dé miedo “venderte” y mostrar de qué estás hecho, si tú que te conoces no lo haces, ¿quién lo hará?
¿QUIÉNES TE RODEAN?
Si andas con tóxicos en eso te conviertes; si solo andas con pobres en ese te conviertes; si andas con miedosos, así seguirás.
Si le tienes tanto miedo al fracaso, aléjate de los fracasados; si le tienes tanto miedo a la depresión, aléjate de los depresivos. Si le tienes tanto miedo al conformismo, aléjate de los conformistas. Ya me entendiste. Tienes una cita con la grandeza; que el miedo no impida que llegues a tiempo a ella.
Desde mi punto de vista, tú puedes dar saltos cuánticos para ver el miedo de manera diferente cuando pasa una de las siguientes tres situaciones: aprendiste mucho de algo; sufriste demasiado con algo; o te cansaste de hacer algo, y dijiste ya no más.
MÁS SEGURIDAD EN TI MISMO
A mayor seguridad en ti mismo, a mayor autoconfianza, más seguridad de lograr lo que te propones.
Tú solo te convertirías en aquel que tienes en tu cabeza. Visualízate en los mejores escenarios, haciendo las mejores obras, viviendo los mejores momentos de felicidad intensa. Y trabaja por ello. ¿Sabes qué ocurrirá? Lo que era de esperarse. Lo volviste una realidad. Tu mundo interior, creó tu mundo exterior. Nada que inspire más a una vaca púrpura que tres palabras: “Tú no puedes”. Ya veremos, ya veremos, dirás. La incredulidad es el combustible de quienes nacimos para brillar, nuestro principal alimento. Sin la incredulidad la vida seria aburrida; la incredulidad y el tú no puedes, son expresiones que nacieron para ser derrotadas.
SÉ MÁS EXPRESIVO
Lo cierto es que si sonríes más la vida te sonreirá más a ti: si amas más, más amor te darán; y si abrazas más, nunca te faltará energía. ¿Sabes qué se esconde detrás de una persona poco expresiva? Timidez, dureza, resentimiento, falta de amor, soberbia, entre otros. Ninguna de las anteriores la quieres para tu vida. El abrazo es la medalla; lo que hay antes es el amor, el interés por el otro, la sencillez, la espontaneidad, el afecto; todo eso que te llevó a abrazar. Eso sí lo quieres tener, ¿verdad?